Hay un mito que va y viene respecto a todas nosotras: la forma en la que nos arreglamos. Pero sobre todo: ¿para quién lo hacemos? La respuesta más lógica debería ser para nosotras mismas: arreglarnos para sentirnos bien, fresca en verano, para sentirnos bellas frente al espejo y demás. Pero no todos los que nos rodean piensan así: hay quienes se visten solamente pensando en seducir hombres, o en llegar lindas al trabajo. Pero ¿qué hay de la competencia entre mujeres? ¿Es tan cierto que nos vestimos para estar más atractivas que las otras?
Vestirse para competir, para estar siempre perfectas y tener lo último de la moda, es un tema que siempre ha estado en el tapete. Si nos guiamos por esta premisa, asumimos también que las mujeres miramos constantemente y casi de manera inconsciente, qué tienen puesto las otras. Si es una prenda que nos gusta, la pregunta obligada es “¿Dónde la compraste?” seguida de un “¡qué linda te queda!” mientras por dentro pensamos ¡por qué no la habremos visto primero!
A todo esto, mientras los hombres piensan que nos vestimos para ellos, la gente piensa que nos vestimos para competir con otras mujeres, y nosotras pensamos que nos vestimos para nosotras mismas ¡qué confusión! Pero no debes sentirte abrumada con todo esto. A continuación algunas preguntas importantes para ti misma que te ayudaran a conocerte y lograr una autoestima saludable para que lo único que pienses sea en sentirte bien contigo misma y ensenarle al mundo lo hermosa que eres sin importar lo demás…
¿Cómo me siento cuando visto una prenda nueva y tacones altos para salir con mis amigas?
¿Cuáles son esas piezas de ropa que me hacen sentir cómoda?
¿Cada cuánto tiempo dedico un día para un cambio radical de look y para reorganizar mi armario?
¿Mis amigas o mi novio influyen en mi estilo?
¿Cómo me visualizo físicamente en seis meses?
Luego de contestar todas las preguntas comienza a ver revistas y estilos que te gusten a ti, que te hagan sentir hermosa y comienza a organizar lo que te gustaría comprar y modificar en tu armario. Para tus amigas, para tu novio, para otras mujeres, no importa quienes sean los que te vean, lo importante es que lo hagas por ti, por sentirte mejor, por proyectar salud y felicidad contigo misma y con quien eres. No pierdas energía en demostrar al mundo algo que solo puedes trabajar tu contigo y con quererte y aceptarte tal como eres.