Antes de querer lavarte el cabello analiza si realmente está sucio porque en algunas ocasiones muchas de nosotras queremos lavar el cabello todos los días por pura vanidad. Igual puedes mantenerlo limpio por más tiempo en una cola de caballo o trenza al lado. Para no gastar una gran cantidad de agua lavándolo, peinar todas las hebras con un cepillo de dientes anchos antes de bañarte puede refrescarlo y mantenerlo sin nudos. Esto es un dato muy importante al momento de lavar tu cabello de forma rápida ya que mantenerlo desenredado y fresco hace que gastes menos agua.
¡Manos a la obra!
– Coloca un cubo debajo de la ducha mientras te estas enjuagando las hebras de cabello, puedes guardar el agua que cae para eliminar más adelante el “Shampoo”.
– No utilices exceso de “Shampoo”… Aplica la cantidad que sea igual al tamaño de una moneda de 25 centavos. Masajea todo el cuero cabelludo hasta la punta del cabello y luego enjuague utilizando el agua que está dentro de la cubeta.
– Aplica un poco de acondicionador permanente que no debas remover. Esto te ahorra otra enjuagada. Te recomendamos el “Coconut oil Leave-in Conditioner Palmer’s” o el “Sleek & Shine de Garnier”.
El “Shampoo” seco como aliado…
Otra opción es lavar el cabello con “Shampoo” seco. Este producto es adecuado para aquellos momentos en que no tienes agua. Te recomendamos el “Batiste Dry Shampoo” y el “Instant Fresh” de Garnier Fructis.
– Aplica el “Shampoo” en la raíz del cabello, en las regiones en las que sientas más cantidad de aceites con los dedos. Puedes aplicar también el producto antes de ir a la cama, así al despertar sentirás menos grasa y tendrás más volumen.
Aunque es eficaz, el “Shampoo” no se puede utilizar en exceso, después de un lavado en seco, y recomendó que se lava el cabello con agua, utilizando el “Shampoo” y el acondicionador normal, para eliminar el aceite y renovar la hidratación de la punta.